Tiempo de lectura: 2 minutos
Desenchufar los electrodomésticos para ahorrar en la factura es una práctica común entre los profesionales de la hostelería. Querer aumentar la rentabilidad de tu negocio es una buena razón para hacerlo, aunque olvides sus consecuencias. Por tanto, ¿es conveniente apagarlo todo una vez acabado el servicio? La respuesta es no.
Tabla o índice de contenidos:
Beneficios e inconvenientes de desenchufar los electrodomésticos
Es evidente que un electrodoméstico desenchufado no gasta energía y previene el riesgo de incendios. No obstante, en lugares como los negocios, desenchufar los electrodomésticos conlleva más inconvenientes que beneficios. El gasto energético de un grifo de cerveza o una nevera industrial siempre es mucho mayor al inicio.
El funcionamiento del motor de refrigeración
El motor de refrigeración de un expositor refrigerado debe trabajar el doble para recuperar el frío que ha perdido mientras permaneció desenchufado. Una vez alcanzada la temperatura adecuada, el compresor se apaga automáticamente reduciendo el gasto energético. A la problemática energética de las neveras se le añade otros inconvenientes asociados.
Los alimentos y bebidas almacenadas en estos electrodomésticos pueden perder calidad, ya que los cambios de temperatura aceleran la descomposición. Por otra parte, el sobreesfuerzo que realiza al enfriar desde cero puede afectar a su vida útil en el medio plazo.
Efectos negativos en los grifos de cerveza
Los grifos de cerveza desenchufados sufren cambios de temperatura, produciendo la formación de espuma en la tirada inicial. Este desperdicio sumado al deterioro del aparato disminuirá la rentabilidad de tu negocio.
Es cierto, que los cambios moderados de temperatura no afectan a la calidad de la cerveza. Sin embargo, temperaturas extremas de 30 grados o más pueden favorecer su oxidación. Este proceso es el responsable de la pérdida de sabor de la cerveza.
Alternativas para ahorrar según el caso
Si queremos ahorrar energía no es conveniente desenchufar los electrodomésticos en un período de tiempo corto. Si pretendes apagar todos los aparatos por la noche para volver a encenderlos horas después o incluso unos pocos días, piénsalo dos veces. No solo no verás ningún ahorro en la factura de la luz, sino que acabarás gastando dinero en comprar piezas de recambio o incluso aparatos nuevos.
En cambio, si pretendes cerrar tu local durante un período de tiempo más largo, es una opción acertada. Durante las vacaciones, el local permanece cerrado un mínimo de 15 días. En este tiempo, nadie vigila el local y el riesgo de incendio es mayor. En Hostelería UNO seguiremos dándote los mejores consejos para rentabilizar tu negocio y ahorrar en tu factura.
Un comentario
Hola!!
Acabas de resolverme una gran duda, te cuento:
Yo tengo junto a mi Hermandad (Del Mayor Dolor, Priego de Córdoba) un cuartelillo, con neveras y un arcón, el cual se abre a los hermanos solo los viernes y sábados de cuaresma, el resto del año cerrado, pero para estos 5 días entre semana es conveniente apagar las neveras?
Gracias!
Saludos!