Es importante conocer la diferencia entre butano y propano, además de conocer a fondo las características del gas natural.
En hostelería podemos encontrar equipamientos que utilizan diferentes fuentes de energía para cocinar los alimentos. Se suelen utilizar cocinas de gas natural y propano, mientras que el butano tiene un uso puntual en pequeñas estufas o encendedores.
Es importante conocer bien las diferencias entre estos tres tipos de gas y saber cuáles son las ventajas de elegir uno u otro.
En este artículo te contaremos en qué se diferencian cada uno de estos gases, sus principales usos y características, y todo lo que necesitas saber para elegir bien el equipo perfecto para tu negocio.
Tabla o índice de contenidos:
Gas natural para hostelería
El gas natural procede de la degradación de la materia orgánica y se distribuye a los consumidores en forma gaseosa.
El uso del gas natural en hostelería supone un ahorro en la factura de gas y un menor deterioro de los electrodomésticos. Además, no solo se utiliza como fuente de calor en cocinas o climatización del local, si no que también se utiliza como fuente de energía para equipos de refrigeración.
Son muchos los hosteleros que se decantan por hornos de gas debido al ahorro energético, más teniendo en cuenta la importante subida en la factura de la luz que está teniendo lugar en España.
De los tres, es el que menos contamina y su instalación es muy sencilla. El problema es que actualmente la red de suministro no llega a todo el territorio español, aunque se vaya ampliando.
Gas propano para hostelería
El gas propano se extrae del proceso de refinación del petróleo crudo y del gas natural, y se distribuye de forma líquida en bombonas, canalizado mediante un depósito central o a granel para usuarios con su propio depósito.
Es una buena alternativa en negocios de hostelería si no se dispone de suministro de gas natural, aunque es un poco más caro que el anterior.
Gas butano para hostelería
El gas butano se distribuye siempre en forma líquida en bombonas, ya que no puede ser almacenado en un depósito y servirse a través de un sistema de canalización.
Suele utilizarse para usos puntuales como combustible para encendedores o estufas portátiles domésticas, pero nunca en instalaciones grandes o industriales. Por tanto, no se suele utilizar demasiado en maquinaria de hostelería. Además, este gas es altamente inflamable y es el más caro de los tres.
Diferencia entre gas butano y gas propano
Una de las principales diferencias es la capacidad para ser almacenado, ya que el gas propano resiste temperaturas de hasta -44ºC, lo que permite su instalación y canalización en exterior. Mientras que el gas butano se evapora a los 2ºC, por lo que solo puede usarse y almacenarse en interiores.
Otra característica muy importante es que el gas propano tiene mucho más poder calorífico que el gas butano. Produce mucho más calor en menos tiempo gastando menos combustible, por eso te permitirá reducir el gasto energético de tu cocina y tu negocio de hostelería.
El gas butano es una solución para consumos puntuales domésticos, pero el propano es una fuente energética mucho más eficiente y cómoda, tanto para hogares como para negocios, bares, restaurantes y hoteles.
