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Nuestras salidas al bar siempre son más divertidas e inolvidables si se acompañan con unos mejillones a la marinera. Sin duda, uno de los aperitivos más demandados, no solo en España, sino en muchos países.
A continuación, te presentaremos una tapa caliente para bar de origen gallego, que se ha extendido por todo el territorio peninsular a lo largo del tiempo. Lo mejor, es que es una opción muy fácil y rápida, que te tomará solo minutos.
Para poder llevar a cabo esta tapa caliente necesitarás el mejor material en utensilios y menaje de cocina.
Para comenzar, ten a la mano los siguientes ingredientes y sigue los pasos a continuación para su preparación:
Tabla o índice de contenidos:
Ingredientes
2 kilogramos de mejillones.
4 dientes de ajo.
1 cucharada de harina de trigo.
100 ml de vino blanco.
½ cucharada de cayena molida.
1 cucharada de perejil.
Un chorro de aceite de oliva.
Una pizca de sol.
Preparación
Limpia los mejillones, quitando toda la barba y residuos de arena. Luego, colócalos en una olla con tapa a fuego alto para que se cocinen con su propio vapor, durante 2 minutos aproximadamente. Remueve de vez en cuando.
Una vez listo los mejillones, retíralos del fuego, escurre el agua y reserva en un bol.
Para poder llevar a cabo esta tapa caliente necesitarás el mejor material en utensilios de cocina.
Luego, en la misma olla hacemos la salsa que acompañará a nuestros mejillones a la marinera. Comenzaremos colocando un chorrito de aceite de oliva a fuego lento hasta que caliente. Luego, añadimos el ajo picado, y procedemos a remover con una cuchara hasta que esté cocido.
Terminado este proceso, subimos el fuego y se añade la harina sin dejar de remover, hasta que se tueste, pero sin que llegue a quemarse. Ahora, agregamos el vino blanco y seguimos removiendo.
Posteriormente, se debe agregar el perejil picado, acompañado de la cayena molida. Procede a remover hasta que se hayan integrado todos los ingredientes.
Una vez listo, procede a añadir los mejillones que habías reservado. Dejar cocinar por aproximadamente 5 minutos, mientras se integran con el resto de la mezcla.
Finalmente, una vez desarrollados todos los sabores llegó el momento de probar la salsa. Ahora, ha llegado el momento de comprobar que tenga la cantidad de sal y agua adecuada a tu gusto, con la consistencia deseada.
