¿Existe algo más universalmente querido que el helado de bola? Seguro que lo vives como el sabor de la infancia, el capricho del verano, el postre perfecto y, cada vez más, un placer para disfrutar durante todo el año.

Si regentas una heladería o piensas abrir una, te estarás preguntando que sabores de helados incluir en tu vitrina para helados. Y es que debemos elegir los sabores correctos para aprovechar correctamente las cubetas disponibles en nuestro mobiliario de heladería.

Por eso, para cualquier negocio de hostelería, desde heladerías, restaurantes y cafeterías hasta hoteles y bares, ofrecer una selección cuidada de helados no es solo una opción más. Hablamos de una oportunidad de oro para deleitar a los clientes y aumentar la rentabilidad.

Los mostradores para heladerías pueden ser una inversión muy rentable pero ¿cómo acertar en la elección? ¿Qué sabores no pueden faltar? Y ¿es realmente tan importante dónde y cómo los presentemos? Vamos a verlo.

Los Reyes de la carta del sabores: nunca fallan

Aunque la innovación es bienvenida, hay sabores que son auténticos pilares en el mundo de los helados, especialmente en España. Con ellos te aseguras una base sólida para tu oferta.

• El chocolate. Es el rey indiscutible. No importa si es intenso, amargo o suave y con leche, el helado de chocolate es una apuesta que conquista a casi todos los paladares. Es versátil y nunca decepciona.
• La vainilla. Es un clásico eterno y elegante. Su aparente simplicidad es su mayor fortaleza, sirviendo como base perfecta para combinar con otros postres o para disfrutarla en su pura esencia. La calidad de sus ingredientes será la clave de tu éxito.
• La fresa. Es el sabor preferido entre los frutales. Porque su frescura y ese equilibrio perfecto entre dulzor y acidez lo convierten en un must-have, sobre todo en los meses más cálidos.

Estos gigantes forman la Santísima Trinidad del helado, pero en el “top ten” encontramos otros favoritos, solos o con trocitos, que no pueden faltar en tus vitrinas de helados.

La mejor selección para tus vitrinas de helados

Después de nombrar al trío más importante, vamos a ver cuál es el coro que debería acompañarle.

• El helado de turrón. Un sabor que evoca tradición y celebraciones, pero que ha demostrado ser un éxito durante todo el año, conectando con nuestras raíces y engatusando a nuestro paladar.
• La stracciatella. Esta deliciosa combinación de nata (o vainilla) y virutas de chocolate crujiente es un clásico italiano que hemos adoptado con fervor. El dúo perfecto para terminar cualquier comida.
• El de pistacho. Con ese color distintivo y su sabor sofisticado, el helado de pistacho ha pasado de ser una novedad a un imprescindible, especialmente valorado en sus versiones artesanales.
• Helado de limón. Aquí tendríamos al rey de los sorbetes. Un bocado refrescante, digestivo y perfecto para combatir el calor o limpiar el paladar.
• Nata y leche merengada. Son dos sabores que nos conectan con la tradición más casera; la cremosidad de la nata o el toque cítrico y de canela de la leche merengada siguen siendo apuestas seguras para tu negocio.
• Oreo o cookies. Sobre todo en sus versiones con galletas troceadas, tipo Oreo, triunfan de manera arrolladora entre el público joven.

Con los expositores de helados adecuados y una selección de este nivel permitirá satisfacer a una amplia mayoría de tus clientes. Incluso te permitirá añadir otros sabores más innovadores manteniendo una base sólida.

¿Sabías qué… ? El lado curioso del helado

Para añadir un toque de encanto y conversación a tu oferta, puedes sorprender a tus clientes con algún dato curioso.

• Los helados tienen un origen milenario y, aunque lo asociemos con Italia, su lugar de nacimiento fue China. Se dice que fue Marco Polo quien los introdujo en Europa.
• El sabor más popular a nivel mundial es la vainilla.
• Comer helado nos pone de buen humor. Porque contiene triptófano, un aminoácido que ayuda a producir serotonina, la “hormona de la felicidad”.
• En Nueva Zelanda, el país que más helados consume por habitante (más de 26 litros al año), se comen todo el año. Y eso que su temperatura media no es precisamente tropical.
• El frío del helado tiene propiedades vasoconstrictoras, por lo que a veces se recomienda tras algunas intervenciones dentales como antiinflamatorio.

Ahora solo te falta escoger el tamaño de tu vitrina expositora y la variedad de tu carta. Verás que el helado será el complemento perfecto para la oferta de tu negocio.

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